Realmente éste artículo no tiene nada que ver con las camisetas o con el marketing como hasta ahora habíamos tratado en el blog, pero sí tiene que ver con el sutil y "democrático" adiestramiento, que está llevando a cabo el Consejo de Administración, de la afición sevillista. Recordemos que el Sevilla es un club donde caben todas las personas de cualquier nivel social, cualquier ideología, cualquie raza y cualquier religión, según el discurso de Jose Luis Gallegos Arnosa tras la fundación del club y sus estatutos. Cuando hablamos de ideología para el actual Consejo de Administración sólo existe el españolismo, cuando hablamos de nivel social para el actual Consejo de Administración sólo existe la clase media alta y cuando hablamos de religión para el actual Consejo de Administración sólo existe la católica, apostólica y romana. Prueba de todo esto las tenemos, no hace falta que nos justifiquemos, españolización del club, subida de precios de los abonos, programas de radio dedicados a la Semana Santa, suplementos dominicales dedicados a la Semana Santa etc. Es evidente que el Consejo de Administración sólo tiene un concepto de sevillista. El del sevillista español, capillita y de dinero. Y una vez más se equivocan y faltan a los valores de nuestro club, porque no todos se sienten españoles, ni todos son capillitas y ni todos los sevillistas son de dinero, así pues una vez más palito a los miembros del Consejo que en este sentido no lo están haciendo nada bien y que por el bien del Sevilla y del Sevillismo se dediquen al fútbol y dejen de influenciar a una afición en la cual conviven muchas ideologías, religiones, razas y clases sociales.
Que no parezca que estamos en contra de la Semana Santa Católica sino todo lo contrario, lo único recalcar que el Sevilla FC sigue siendo un club de fútbol y nada más, y que a eso se debe y en eso se debe centrar la actual directiva.
